¿Estás en poder de tus pensamientos, en control de tu mente? Si lo piensas y ves de una manera atenta, no mucho. En una gran cantidad de los muchos minutos que contiene un día, y en todas la tareas que vienen con ellos, tu mente en muchas ocasiones funciona en piloto automático.
¿Te diste cuenta de todo lo que ocurrió cuando ibas camino al trabajo, a casa o a estudiar?, ¿las canciones que sonaron en la radio? o más importante aún, ¿Te diste cuenta todo lo que pasó por tu mente, conversaciones e imágenes que se crearon en tu imaginación, en el camino?, ¿Decidiste poner esos pensamientos ahí o ellos solo aparecieron?
Este es el problema del piloto automático: En muchas ocasiones se activa cuando estamos realizando una tarea habitual como desayunar, amarrar tus zapatos, bañarse, trabajar o incluso cepillarse los dientes.
Es en estos momentos en los que 'te subes a las nubes' que se activa el piloto automático y empiezan a entrar pensamientos de cualquier tipo en nuestra mente, desde recuerdos - felices, tristes y hasta emocionales - hasta visiones de futuro - cercano o lejano -.
El poder que tiene el piloto automático en tu mente es realmente interesante, pues si te das cuenta, ¿Cada cuanto piensas o sientes mientras te cepillas los dientes; lo que sienten tus encías, el movimiento de tu mano y tus brazos, cómo estás sonriendo, qué tanto te demoras y muchas otras variables de esa simple acción?. Tu mente se desconecta de este presente absoluto y empieza a trabajar por sí misma, llenando tu mente de pensamientos que tú no has decidido poner allí.
Para volver a entrar en control de ese piloto automático basta con intentar realizar una actividad cotidiana como si fuera la primera vez que lo haces y experimentar las sensaciones y reacciones que vienen con la primera copa de café, con el sabor a menta en tu boca cuando te lavas los dientes, amarrar el nudo de la corbata o de los zapatos, o sentir los pasos que das cuando entras a trabajar y te sientas en tu oficina. Realizar tareas cotidianas con consciencia de lo que se está haciendo ayudará a tu mente a entrar en un mayor control en otros escenarios que requieren que lo que pasa dentro de tu cabeza esté bajo tu control.
Hay peligro en dejar que el piloto automático funcione con regularidad y sin control, y de ahí la importancia de saber en dónde pones tu pensamiento. Si tu vida dependiera de tus pensamientos, ¿Los pondrías a trabajar como a ellos les antoje ?. Existe un gran poder en cómo piensas y cómo ello altera tus emociones y ese poder quieres tenerlo tú. El piloto automático funciona hasta donde se lo permites, y en este sentido tu poder no se ha esfumado del todo. Ya sabes en qué escenarios puede encenderse - aunque no sean universales para todos -, ahora es momento de decidir si dejas que él trabaje con tu poder o sin él, de cualquier forma trabajará.
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