Parte importante para salir adelante en la vida, cumplir sueños y romper barreras es eliminar limitaciones. Una de las peores; de las más negativas y la razón -en muchos casos- por la que hay metas sin cumplir en muchas vidas es esta: No puedo. Enfrentar y derrotar día a día esta limitación es la razón por la que hoy sigo cumpliendo mis objetivos.
Recién recibí la noticia de que mi vida no sería la misma, mi mente empezó a imaginarse mil y un escenarios sobre lo que podría pasar con mis planes, proyectos y sueños, esos que abundaban en mí cuando no había cumplido ni siquiera 17 años de andar sobre esta tierra. ¿Qué pasaría con mi sueño de jugar fútbol profesionalmente?, ¿Qué pasaría con mi sueño de vivir en otro país?, ¿Qué pasaría con mi sueño de tener un título profesional?... Y a fin de cuentas todas estas preguntas se resumirían en una sola: ¿Podría cumplir todas mis metas y sueños?
En un principio la respuesta era sencilla -y, si se quisiera, argumentada-: No. De hecho recuerdo las palabras que salieron de uno de los neurólogos que tuve el gusto de conocer y que me ayudó gracias a ellas: "Tienes que acostumbrarte a que vas a vivir con ciertas limitaciones". Pero recuerdo más aún lo que después le dijo a mis papás: "Es muy posible que tengan que buscar un colegio a distancia para que termine, puede ser que no pueda ir a la universidad". Hasta acá el tema no era si quería lograr o hacer ciertas cosas, el tema era que no 'podría hacerlo'.
La esclerosis múltiple, es una enfermedad neurodegenerativa que tiene muchas variables y puede tener diferentes consecuencias dependiendo de muchos factores, en mi caso las consecuencias fueron perder movilidad, sensibilidad y un poco la vista. Sin embargo mi caso no es igual al de otros pacientes con el mismo diagnóstico y como el diagnóstico es diferente -y se vive de diferentes maneras- para cada paciente, me hice la siguiente pregunta: ¿Porqué debía yo, si cada caso era diferente, vivir en limitaciones entonces?
Todas las limitaciones de esta vida son discutibles mientras sean verdades relativas. En ese momento mis limitaciones no eran propiamente mías, eran limitaciones que venían de una verdad relativa que el doctor me hizo entender como absoluta y real como la inercia o la gravedad. Por lo anterior en muchos escenarios me limité, sin embargo después de seis meses de terapia empecé a cuestionar esta 'realidad' que me estaban intentando 'obligar' vivir. Después de este momento, después de darme cuenta que las limitaciones no son más que lo que se construye en la mente he cumplido tantas metas y sueño que necesitaría más de una entrada para mencionarlas todas.
Me gradué del colegio, empecé y terminé mi carrera profesional en una de las mejores universidades de Colombia, una llena de escaleras lo cuál fue un reto más en esta etapa, he sido capáz de aprender más de cinco idiomas -y voy por el sexto-, he logrado caminar -y trabajo por correr de nuevo-, y creo que lo más importante es que he aprendido a ser feliz y levantarme más fuerte después de cada caída. He logrado todo lo anterior y voy por más, busco ser cada vez más y todo lo he logrado gracias a soltar limitaciones, a enfrentar nuevos retos cada día, a tener una fe firme y a no repetir, nunca, la frase tan nociva, 'no puedo'.
"Todo lo puedo en Cristo que me fortalece."
Filipenses 4:13
"Cada adversidad lleva consigo la semilla
de un beneficio equivalente o
mayor a dicha adversidad"
Napoleón Hill
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