Se nos ha dicho desde hace mucho que la realidad es absoluta, inamovible e igual para todos. Aunque hay algo de verdad en esto es interesante pensar en la posibilidad de crear tu propia realidad, una que se construye desde una felicidad real e ilimitada en el presente y una visión clara de lo que se quiere en el futuro.
El estado ideal de tu realidad es el siguiente: Eres feliz en el ahora y tienes una visión certera del futuro, una que te emociona y te mueve. Las ideas que has generado para tu futuro son las que te halan hacia adelante, es donde quieres estar, sin embargo eres feliz en este presente, a pesar de que esa visión se pueda ver distante.
Cuando estás en tu estado ideal y a pesar de que tu visión tal vez aún no sea real hay un sentimiento de crecimiento y de disfrute, se siente casi como si la suerte estuviera de tu lado. Este estado ideal es el que te propulsa hacia tus sueños y tu futuro ideal.
SER FELIZ EN EL AHORA
Para llegar a estar en este estado ideal en el que solo sientes que buenas cosas vienen a ti, que tu futuro y tu visión se acercan a ser tu realidad presente se debe tener en cuenta un par de importantes nociones de la felicidad. El primero de estos es no condicionar tu felicidad a cumplir esas metas que tienes, sino a el persecución de esa meta. Esta primera parte de ser feliz en el ahora debe ser real y para serlo se debe estar agradecido con el presente, lo que ya tienes. Con esto no condicionarás la felicidad: Si pasa ... seré feliz / Cuando haga ... podré sonreír.
Ser feliz en el presente no te obliga a esperar la felicidad futura. Perseguir tu sueño es el motor, es lo que te motiva y te llena de una sensación que te mantiene motivado y te sigue moviendo hacia adelante. Por lo anterior es que es importante que tu visión de futuro sea una que realmente te motive, pues a pesar de trabajar mucho, de casi no descansar no te sentirás agotado., pues te mueve algo mayor hacia algo mayor.
DESARROLLAR UNA VISIÓN EMOCIONANTE DEL FUTURO
Aunque es importante vivir el presente, lo que realmente hace extraordinarias personas es tener una visión casi palpable de futuro; de lo que quieres en el futuro.
Viajar a los Alpes Suizos, tomar un chocolate caliente al pie de la Torre Eiffel, criar una bella familia, poder pasar más tiempo con tus hijos y pareja que en en trabajo, aprender un nuevo idioma... Las opciones son ilimitadas, por lo que atar tu visión a algo que realmente te motive es lo que te ayudará a llegar a cumplirlo.
La visión de futuro que quieres es una que realmente le hable a tu alma, que mueva tu corazón, que te haga emocionarte mucho y asustarte un poco, como dice Joe Vitale.
Para construir tu realidad es importante que tus metas sean, primero, metas que no estén atadas a algo que te haga feliz por un tiempo, debes atarlo a experiencias, a tu crecimiento y a cómo puedes contribuir al mundo a partir de ese objetivo. Metas que te muevan más allá. Segundo, que no limites tus capacidades y posibilidades, en nuestra naturaleza tendemos a sobrestimar los que podemos hacer en un año y subestimar lo que podemos hacer en tres años.
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