¿Respiras antes de responder esa llamada que no querías recibir?, ¿Siempre que entras a trabajar te preguntan si estás enojado así no lo estés?. Si prestas atención a cómo funcionas como persona, realmente has estado haciéndolo como un robot, programado por nadie más que tú. Ahora que lo sabes, ya puedes empezar a cambiarlo.
¿Sabías que más del 90% del comportamiento humano funciona en piloto automático? Esto se debe a que nuestras conexiones neuronales están tras todos nuestros hábitos, y está en su funcionar crear pequeños 'atajos' que nos permitan vivir y funcionar de la mejor -y más fácil- forma en este mundo. Estas acciones que funcionan por defecto en el cuerpo son aquellas que nos hacen recaer en ciertos acciones o pensamientos antes de darnos cuenta de ellos.
Vivir o estar en un estado Mindfulness o de atención plena nos permite reconocer en qué momento soltamos el control de nuestra mente al piloto automático. Entramos más en un control ejecutivo sobre nuestra mente y lo que hacemos, permitiéndonos acciones y decisiones mucho más intencionales. Esto es lo que viene como resultado de mucho practicar, meditar y entrar en este estado.
Nuestro consciente es muy diferente al subconsciente, de hecho lo que tenemos y somos viene de una serie de resultados que ha producido el segundo. Aunque no lo quieras, tu piloto automático está funcionando con constancia plena, y es la razón por la que muchas veces nos encontramos atravesando atajos por los que no hemos decidido transitar, esos que salen a flote, por ejemplo, cuando llegas a un lugar y ni siquiera notaste cuantas personas saludaste antes de estar ahí.
De aquí se desprende la importancia de este concepto: 'Diseño de Comportamiento'. Es la forma en la que realmente te pones a ti como piloto único de tu nave y dejas apagado el automático. Para crear este estado puedes hacer dos cosas, la primera es desacelerar tu pensamiento, poner obstáculos en su camino, por ejemplo decidir entender todas las canciones que suenan en tu playlist favorita. La segunda es remover los obstáculos que le has puesto a la mente que quieres que esté en control.
Entender lo que quieres cambiar es el primer paso para empezar a diseñar un mejor comportamiento, el segundo paso es empezar a trabajar por hacerlo, reduciendo en una gran medida el poder del autopilot. Algo que podrías empezar a hacer es crear condicionales (Si ..., entonces ...) que te ayuden a alterar ciertos patrones, por ejemplo si quisieras cambiar un comportamiento como siempre revisar tu celular, mentalmente pensarías, dirías y harías lo siguiente: Si voy a agarrar mi celular para algo que no es productivo, entonces entrecruzo los dedos. Lo mejor de hacer estos cambios es que en la medida que generen un cambio positivo, van a generar un comportamiento diferente y mejorado.
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